miércoles, 10 de abril de 2013

La Segunda Guerra Mundial y sus consecuencias

Salvad al soldado Ryan

En 1939 la guerra civil europea interrumpida veinte años atrás va a reanudarse. Pero ahora, a los conflictos nacionalistas entre las potencias se le añaden los conflictos ideológicos, consecuencia de los distintos proyectos totalitarios que han surgido en los últimos años. Se oponen unos a otros radicalmente (aunque el rechazo absoluto enmascara en ocasiones una llamativa coincidencia de métodos). Con frecuencia pesa más en la conducta ser anti aquellos que se percibe como enemigos: antiliberal, anticomunista, antifascista. Cuando la guerra se extienda por casi toda Europa, una consecuencia será la proliferación de auténticas guerras civiles en el interior de cada país ocupado, entre los que consideran al ejército extranjero ocupante o libertador.


Los materiales del tema

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Para leer más

Ana Frank, Diario
Es el relato verídico, día a día, de las vivencias de una niña judía escondida con su familia en el Amsterdam ocupado por los alemanes. Lo que comienza siendo un diario infantil (el colegio, sus amigos, los regalos de cumpleaños) pronto se transforma en una mirada penetrante a las condiciones extremas en que se encuentra, ella y millones de europeos. Un libro imprescindible.

Joseph Joffo, Un saco de canicas
Las aventuras de dos hermanos judíos en su huida desde el París ocupado por los alemanes hasta el sur de Francia: el paso de la línea de demarcación, sus encuentros con la gestapo, sus escondites, sus recursos para sobrevivir... Es una novela muy amena, pero es algo más: los recuerdos de la niñez del autor.


Art Spiegelman, Maus I
Art Spiegelman, Maus II
Uno de los grandes autores de cómic actuales nos cuenta las peripecias vitales de su padre (con el que no acaba de llevarse bien) antes y durante la segunda guerra mundial en su Polonia natal. Con un lenguaje visual procedente del mundo underground, esta inmensa obra se convirtió en un clásico desde su misma publicación. Puedes visionarlo con GonVisor.

Actividades

7.1. Reacciones de líderes francobritánicos ante la marcha de la guerra, en 1940.
Lee estos dos textos y realiza un comentario extenso. Puede tener la siguiente estructura orientativa, pero puedes enfocarlo de otro modo si te parece más enriquecedor.
  • Quiénes los pronuncian y en qué circunstancias.
  • Qué es lo que dice cada uno. Con qué propósito. ¿Es el mismo en los dos textos?
  • ¿Han cambiado las circunstancias entre uno y otro? Explicalas.
  • La postura política que se expresa en estos discursos, ¿cómo influirá en la marcha posterior de la guerra?
Deberá enviarse a lo largo de esta semana.

Discurso de Churchill a la Cámara de los Comunes (Londres, 13 de mayo de 1940)
Debemos recordar que estamos en las fases preliminares de una de las grandes batallas de la historia, que nosotros estamos actuando en muchos puntos de Noruega y Holanda, que estamos preparados en el Mediterráneo, que la batalla aérea es continua y que muchos preparativos tienen que hacerse aquí y en el exterior. En esta crisis, espero que pueda perdonarseme si no me extiendo mucho al dirigirme a la Cámara hoy. Espero que cualquiera de mis amigos y colegas, o antiguos colegas, que están preocupados por la reconstrucción política, se harán cargo, y plenamente, de la falta total de ceremonial con la que ha sido necesario actuar. Yo diría a la Cámara, como dije a todos los que se han incorporado a este Gobierno: «No tengo nada más que ofrecer que sangre, esfuerzo, lágrimas y sudor».
Tenemos ante nosotros una prueba de la más penosa naturaleza. Tenemos ante nosotros muchos, muchos, largos meses de combate y sufrimiento. Me preguntáis: ¿Cuál es nuestra política? Os lo diré: Hacer la guerra por mar, por tierra y por aire, con toda nuestra potencia y con toda la fuerza que Dios nos pueda dar; hacer la guerra contra una tiranía monstruosa, nunca superada en el oscuro y lamentable catálogo de crímenes humanos. Esta es nuestra política.
Me preguntáis: ¿Cuál es nuestra aspiración? Puedo responder con una palabra: Victoria, victoria a toda costa, victoria a pesar de todo el terror; victoria por largo y duro que pueda ser su camino; porque, sin victoria, no hay supervivencia. Tened esto por cierto; no habrá supervivencia para todo aquello que el Imperio Británico ha defendido, no habrá supervivencia para el estímulo y el impulso de todas las generaciones, para que la humanidad avance hacia su objetivo. Pero yo asumo mi tarea con ánimo y esperanza.
Estoy seguro de que no se tolerará que nuestra causa se malogre en medio de los hombres. En este tiempo me siento autorizado para reclamar la ayuda de todas las personas y decir: «Venid, pues, y vayamos juntos adelante con nuestras fuerzas unidas».


Mensaje del general De Gaulle a lo franceses desde la BBC (Londres, 18 de junio de 1940)
Los hombres que desde hace  muchos años se hallan al frente de los ejércitos franceses han constituido un Gobierno. Con el pretexto de la derrota de nuestros ejércitos, este Gobierno se ha puesto en comunicación con el enemigo para poner fin a la guerra.
Cierto que fuimos y seguimos siendo arrollados por la superioridad técnica del enemigo, lo mismo en tierra que en el aire. Infinitamente más que su número, han sido sus tanques, sus aviones y su táctica los que nos han hecho retroceder. Los tanques, los aviones y la táctica de los alemanes han arrollado de tal forma a nuestros jefes que han llegado adonde se encuentran hoy.
Pero ¿se ha dicho la última palabra? ¿Hay que perder toda esperanza? ¿Es definitiva la derrota? ¡No! Creedme a mí; creed a quien sabe las cosas de que habla; al que os dice que todo no está perdido todavía para Francia. Los mismos medios que nos han arrollado pueden conducirnos un día a la victoria. ¡Porque Francia no está sola! ¡No lo está! ¡No lo está! Tiene tras ella un gran imperio mundial. Puede formar un bloque con el imperio británico, que domina los mares y sigue luchando. Puede, al igual que Inglaterra, hacer uso ilimitado de la gigantesca industria de los Estados Unidos de América del Norte.
Esta guerra no está limitada a nuestra desgraciada patria. La guerra no ha quedado decidida con la batalla de Francia. Esta guerra es una guerra mundial. Todos los errores, todas las vacilaciones, todos los pesares, no pueden impedir que en el mundo haya medios para aniquilar un día a nuestro enemigo. Aunque hoy hemos sido destruidos por la superioridad técnica enemiga, podremos a nuestra vez vencer en el futuro con una potencia técnica superior. Aquí se ventila el destino del mundo.
Yo, el general De Gaulle, actualmente en Londres, invito a los oficiales y soldados franceses a ponerse en contacto conmigo, tanto a los que se encuentran en Inglaterra como a los que acudan a esta isla, lo mismo con armas que sin ellas. También hago la misma invitación a los ingenieros y trabajadores especialistas de la industria de armamento que se encuentren en Inglaterra o vengan aquí. Ocurra lo que ocurra, no debe extinguirse y no se extinguirá la llama de la resistencia francesa.


7.2. Polonia: correspondencia secreta entre los dirigentes aliados
Lee estos documentos, reflexiona y elabora un texto extenso (una carilla, más o menos) sobre ellos. Puedes seguir el siguiente esquema (pero puedes modificarlo si lo consideras oportuno):
  • Resume muy brevemente cada documento: de qué trata, quiénes y cuándo lo redactan y a quiénes se dirige.
  • Interpreta los documentos: intención y objetivos que persiguen. Debes relacionarlos con la marcha de la guerra y los acontecimientos que se producen entonces.
  • Conclusión: Polonia tras la segunda guerra mundial: relación con estos documentos.
a) De Churchill a Stalin (1 de febrero de 1944)
El pasado jueves [...] me entrevisté con los representantes del Gobierno polaco en Londres. Les comuniqué que el problema de garantizar la seguridad de la frontera de Rusia de las amenazas de Alemania es de gran importancia para el Gobierno de Su Majestad, y que nosotros, desde luego, apoyaremos a la Unión Soviética en todas aquellas medidas que creamos convenientes para conseguir este fin. Señalé que Rusia había sufrido dos terribles invasiones alemanas, acompañadas de gran efusión de sangre y de destrucciones, que la existencia y la independencia nacionales de Polonia fueron restablecidas después de la primera guerra mundial y que la política de los grandes aliados estriba en restablecer de nuevo a Polonia después de esta guerra. Dije que, a pesar de que nosotros entramos en la guerra por Polonia, hicimos esto no por una línea de frontera determinada, sino en aras de la existencia de una Polonia fuerte, libre e independiente, cosa que apoya el mariscal Stalin por propia declaración. Además, aunque la Gran Bretaña siguiera luchando varios años hasta que le ocurriera algo a Alemania, el hecho es que la liberación de Polonia del yugo alemán se está realizando a costa de inmensos sacrificios de los ejércitos rusos. Por esto los aliados tienen derecho a exigir que Polonia cuente con su opinión sobre la cuestión de las fronteras del territorio que la formará.

b) De Stalin a Churchill (23 de julio de 1944)
Los acontecimientos en nuestro frente se desarrollan con gran celeridad. Lublin, una de las principales ciudades polacas, ha sido tomada hoy por nuestras tropas, que siguen avanzando. En estas circunstancias, se plantea ante nosotros el problema práctico de la administración en el territorio polaco. Nosotros no queremos crear, y no crearemos, nuestra propia administración en el territorio de Polonia, pues no queremos inmiscuirnos en los asuntos internos de Polonia. Éstos son cosas de los mismos polacos. Por tanto, hemos considerado necesario ponernos en contacto con el Comité Polaco de Liberación Nacional, establecido recientemente por el Consejo Nacional de Polonia, organizado a su vez en Polonia a fines del año pasado, e integrado por representantes de los partidos y grupos democráticos, como habrá sido usted informado por su embajador en Moscú. El Comité Polaco de Liberación Nacional se propone organizar la administración del territorio polaco, y confío en que esto se realice. En Polonia no hemos hallado ninguna otra fuerza capaz de establecer una administración polaca. Las llamadas organizaciones clandestinas, dirigidas por el Gobierno polaco en Londres, han resultado ser efímeras y sin ninguna influencia. En cuanto al Comité Polaco, no puedo considerarlo como Gobierno de Polonia, pero es posible que más adelante sirva de núcleo para la constitución de un Gobierno provisional polaco integrado por las fuerzas democráticas.

c) De Stalin a Churchill (16 de agosto de 1944)
Después de conversar con Mikolaichik, he dispuesto que el Alto Mando del Ejército Rojo arroje municiones, intensamente, en la zona de Varsovia. Se ha lanzado también un paracaidista de enlace, pero, según comunica el Mando, no alcanzó su objetivo y fue muerto por los alemanes. Tras haber estudiado más profundamente el asunto de Varsovia, me he convencido de que lo que está sucediendo en Varsovia es un juego aventurero y terrible que cuesta a la población enorme número de víctimas. No habría sucedido esto si el Mando soviético hubiera sido informado de antemano respecto a la acción de Varsovia y si los polacos hubieran mantenido contacto con él. Ante la situación creada, el Mando soviético ha llegado a la conclusión de que debe mantenerse al margen de la aventura de Varsovia, puesto que no puede asumir responsabilidad alguna, ni directa, ni indirectamente, de la acción de Varsovia.

d) De Roosevelt y Churchill a Stalin (20 de agosto de 1944)
Pensamos en cuál será la reacción de la opinión mundial si los antinazistas de Varsovia son, en efecto, abandonados. Creemos que nosotros tres debemos hacer todo lo posible por salvar el mayor número posible de los patriotas que allí se encuentran. Confiamos en que ustedes lancen municiones y suministros inmediatos a los patriotas polacos de Varsovia. En caso contrario, ¿no convendría usted en ayudar a nuestros aviones a que lo hagan rápidamente? Confiamos en que dé su aprobación. El factor tiempo tiene una importancia extrema.

e) De Stalin a Churchill y Roosevelt (22 de agosto de 1944)
He recibido su mensaje y el de Mr. Roosevelt sobre Varsovia. Quiero exponer mis consideraciones. Tarde o temprano, aparecerá, para todos, la verdad sobre el puñado de criminales que montaron la aventura de Varsovia a fin de arrebatar el poder. Esos elementos, jugando con la credulidad de la población de Varsovia, expusieron a un pueblo prácticamente desarmado al fuego de los cañones y los aviones alemanes. Así se creó una situación en la que cada día es aprovechado, no por los polacos para liberar a Varsovia, sino por los hitlerianos que exterminan cruelmente la población de Varsovia. Desde el punto de vista militar, la situación creada, que mantiene fija sobre Varsovia la atención de los alemanes, también es muy inconveniente, tanto para el Ejército Rojo como para los mismos polacos. Entre tanto, las tropas soviéticas, que últimamente han tenido que hacer frente a nuevos y poderosos contraataques alemanes, hacen todo lo posible por rechazar esos contraataques hitlerianos y pasar a una nueva ofensiva en gran escala cerca de Varsovia. No puede caber la menor duda de que el Ejército Rojo no escatimará ningún esfuerzo para aplastar a los alemanes en Varsovia y liberarla para los polacos. Esta será la mejor ayuda, realmente efectiva, a los polacos antinazistas.

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